Durante las últimas décadas, Islandia se ha convertido en un destino de moda. Las razones fundamentales para ello hay que buscarlas en una naturaleza exuberante y variada, poderosa y arrasadora, pero también en una capital que te sorprenderá cuando te contemos las muchas cosas que ver en Reikiavik.
La capital islandesa sirve de hogar – si tenemos en cuenta la ciudad y las seis municipalidades contiguas a ella – a un 60% de los 372.000 habitantes de Islandia. Es, por lo tanto, el centro cultural, económico y político de este país de hielo y fuego.
Se trata de una urbe en la que habita mucha gente joven y culturalmente inquieta. Eso se nota en las decenas de librerías y bibliotecas – dicen que los islandeses son unos de los que más libros, per cápita, leen en el mundo – que pueblan sus calles, pero también en los museos, galerías de arte, murales de arte urbano y el sinfín de eventos que se organizan durante todo el año.
Entre las muchas cosas que hacer en Rekiavik también hallaremos, por supuesto, varias relacionadas con la bellísima naturaleza que le rodea. Al llegar aquí todos los vuelos internacionales, sirve de base de operaciones para aquellos que quieren visitar la isla, ya sea por unos días o para recorrerla por completo y disfrutar de sus volcanes, glaciares, cascadas, playas salvajes, fiordos, lagos y mucho más.
Si ya te está picando la curiosidad, aquí te dejamos algunas de las mejores cosas que hacer en Reikiavik:
Contenidos
- 1 1. Visitar la iglesia Hallgrímskirkja
- 2 2. Conocer la historia del país en el Museo Nacional de Islandia
- 3 3. Visitar la sala de conciertos Harpa
- 4 4. Admirar el arte urbano
- 5 5. Perderte en los interesantes museos de la ciudad
- 6 6. Excursiones para ver ballenas
- 7 7. Disfrutar de la vida nocturna
- 8 8. Probar la gastronomía islandesa
- 9 9. Ver auroras boreales
- 10 10. Relajarse en aguas termales
1. Visitar la iglesia Hallgrímskirkja
Uno de los iconos que ver en Reikiavik es la imponente iglesia Hallgrímskirkja. Situada en el centro de la ciudad, sirve de referencia para ubicarte en ella.
La fachada del templo religioso más importante de Islandia posee una extraña fachada que recuerda la naturaleza basáltica de la isla.
La parte más llamativa de la construcción – que fue consagrada en 1986 – es su imponente torre de casi 75 metros. Pagando una entrada, también puedes ascender a la torre para disfrutar de una de las mejores panorámicas que ver en Reikiavik.
Ya en la plaza que precede a la iglesia, hay una estatua de Leif Eriksson, el explorador nórdico que pisó américa a principios del siglo XI.
El interior del templo tiene un aire moderno, pero resulta acogedor. Destaca su gran órgano de 15 metros de altura. Una pieza única en su especie.
2. Conocer la historia del país en el Museo Nacional de Islandia
No hay nada como conocer el pasado de un pueblo para entender su presente. Por ello, si eres un amante de la Historia, te recomendamos una visita al Museo Nacional de Islandia como una de las mejores cosas que hacer en Reikiavik.
El Museo Nacional se halla albergado en un sencillo edificio cuyo aspecto exterior no da ninguna pista de las maravillas que se esconden en el interior, distribuidas en dos plantas.
En él podrás disfrutar de más de dos millares de objetos que datan desde la etapa de la colonización de la isla, en el siglo IX, hasta hoy en día. También es muy interesante la colección de algo más de 1.000 fotografías del siglo XX.
Además de la exposición histórica permanente, en el museo también podrás encontrar interesantes exposiciones temporales.
3. Visitar la sala de conciertos Harpa
En el Puerto Viejo de la ciudad, resalta uno de los edificios más bellos que ver en Reikiavik. Se trata de Harpa, una moderna y estilosa construcción que sirve de sala de conciertos y centro de conferencias y actos culturales.
El edificio del Harpa fue finalizado en 2011 y, desde entonces, se ha convertido en un icono de la ciudad.
Lo que más llama la atención es su espectacular fachada. Fue obra de Ólafur Elíasson y se transforma en un auténtico lienzo artístico cuando juegan con su iluminación.
Este lugar sirve de sede permanente a la Orquesta Sinfónica de Islandia y a la Ópera de Islandia, y tiene un completo calendario de festivales a lo largo del año.
Sin embargo, también puedes pasarte a tomarte algo en su cafetería o admirar su tienda de arte.
4. Admirar el arte urbano
Desde hace unos años, el arte urbano se ha ido desarrollando en Reikiavik de manera imparable.
Lo que empezó siendo algo residual como parte de un proyecto para rehabilitar las fachadas de algunos edificios céntricos, se extendió para convertirse en un auténtico fenómeno que se incluye entre las mejores cosas que ver en Reikiavik.
Hoy en día, podrás ver decenas de murales, de distintos tamaños y temáticas, en las fachadas de comercios, casas, bares y otros edificios. De colores brillantes la mayoría de ellos, dan mucha vida a la ciudad.
5. Perderte en los interesantes museos de la ciudad
Si el Museo Nacional de Islandia es básico para entender la historia del país, también existen otros interesantes museos que ver en Reikiavik.
Puedes empezar por el Museo Marítimo de Reikiavik. Se halla albergado en una antigua factoría de pescado congelado situada en el Puerto Viejo. Islandia es un país de gran tradición marinera y pesquera, y aquí podrás aprender todo lo relacionado con su historia.
El Museo de las Sagas es otro imprescindible que ver en Reikiavik, pues en él vuelven a la vida – gracias a unas fantásticas figuras de cera – los héroes más famosos de la historia islandesa. En realidad, las sagas son una mezcla de realidades y leyendas, pero no dejan de ser unos relatos fascinantes.
Sin duda alguna, la Faloteca Islandesa es una de las visitas más originales que hacer en Reikaivik. Se trata de un museo dedicado a los penes de los distintos mamíferos que pueblan Islandia.
Por último, visitar el Museo de las Ballenas de Islandia es un buen plan que hacer en Reikiavik para toda la familia. En él podrás conocer todo lo referente a las más de veinte especies de cetáceos que pueblan las aguas de Islandia. Incluye un buen número de maquetas de ballenas a escala real y se recrea una atmósfera ideal para vivir una experiencia totalmente inmersiva.
6. Excursiones para ver ballenas
Y si el Museo de las Ballenas de Islandia te ha llamado la atención, ten en cuenta que no hay nada como admirar esos majestuosos mamíferos en libertad.
Para hacerlo, podrás contratar alguna de las muchas excursiones que parten del puerto de Reikiavik.
La mejor época para ver cetáceos es entre abril y octubre. De hecho, entre junio y agosto, la probabilidad de ver una ballena es de casi un cien por cien. Sin embargo, en la capital islandesa se realizan este tipo de excursiones durante todo el año. Concretamente, en la bahía de Faxaflói.
7. Disfrutar de la vida nocturna
Reikiavik es una ciudad joven y, como tal, su escena de vida nocturna es realmente variada e intensa.
Aquí podrás ir de bar en bar desde las primeras horas de la tarde hasta bien entrada la madrugada. De hecho, durante los meses de verano el desconcierto es bastante grande, pues no hay oscuridad y pierdes completamente la noción del tiempo. Algo peligroso cuando estás de marcha.
La vida nocturna de Reikiavik se desarrolla, principalmente, en los muchos pubs que se hallan en la calle Laugavegur y dos de sus adyacentes: Bankastraeti y Austurstraeti.
Encontrarás un poco de todo, desde bares con música rock en vivo, hasta pubs en los que un DJ pone reggaetón hasta las 3 de la mañana, pasando por lugares tan originales como 12 Tónar, una auténtica tienda vintage de vinilos y CDs que complementa su oferta con música en directo y pintas de cerveza.
8. Probar la gastronomía islandesa
Puede no ser la más famosa o laureada del mundo, pero degustar la gastronomía islandesa es algo interesante que hacer en Reikiavik.
Conocer la mesa de un país es algo que te da pistas sobre la cultura del mismo.
Islandia posee muy buenos mariscos y pescados frescos. Para comprobarlo te recomendamos que cenes en el céntrico restaurante Messinn. Una auténtica delicia a precio razonable (para el baremo islandés).
También la carne de cordero es especialmente sabrosa, pues estos pacen libremente en lugares en los que apenas tienen estrés.
Algo mucho más casual, y muy bueno, es probar los perritos calientes de Baejarins Beztu. Es un sencillo puesto ambulante que se encuentra junto al puerto. Tiene fama de servir los mejores perritos de Islandia y ha tenido como clientes a personalidades como Bill Clinton y Kim Kardashian.
9. Ver auroras boreales
Uno de los fenómenos más fascinantes que ver en Reikiavik y sus alrededores es las auroras boreales.
Para disfrutar de ese baile de luces en el cielo nocturno, tendrás que visitar la capital islandesa entre los meses de septiembre y abril. Además, tendrás que rezar para tener cielos despejados y, a ser posible, sin luna.
Si se dan esas condiciones, podrás admirar uno de los espectáculos más bellos que nos regala la madre naturaleza. Para presenciarlo, lo mejor es alejarse de zonas que tengan contaminación lumínica.
10. Relajarse en aguas termales
Tanto si has realizado un gran viaje por la isla, como si tan sólo has pasado unos días en la capital, relajarse en aguas termales es una de las mejores cosas que hacer en Reikiavik.
Islandia es un paraíso de energía geotérmica y bajo su capa terrestre fluyen numerosas fuentes de aguas termales. No hay población islandesa, por pequeña que sea, que no cuente con alguna instalación termal en la que poder socializar y descansar. Son lugares que se agradecen, sobre todo, durante los gélidos inviernos.
Sitios como Sky Lagoon o Blue Lagoon (esta segunda es realmente popular, pero se encuentra a unos 50 minutos en coche de la capital) son muy visitados por los turistas y ofrecen una experiencia relajante y lujosa.
Artículo escrito y fotos* tomadas por David Escribano, de Viajablog