Rumanía es un país que sorprende el minuto que lo pisas y quizás sea esa la razón por la que se esté convirtiendo cada vez más en un destino de vacaciones. En IATI, expertos en seguros para el viajero, nos hemos propuesto enseñarte algunos de los motivos que atraen cada vez más viajeros al país del Conde Drácula.
Contenidos
Bucarest
Muchas personas evitan la capital rumana o le dedican el mínimo tiempo posible en su ruta por Rumanía, lo cual creemos que es un error: Bucarest es un ciudad cargada de historia, de lugares para visitar y se está transformando en una ciudad vibrante.
Entre los planes que no te puedes perder en la ciudad está la visita al que es, nada más y nada menos, el edificio civil más grande del Mundo: el Palacio del Parlamento. El imponente edificio con más de 350.000 m2 no deja indiferente a nadie y es todo un símbolo en la ciudad. Después de semejante visita te habrás ganado un descanso así que nada mejor que ir hacia el bullicioso centro histórico y disfrutar del atardecer en una de las azoteas de los edificios neoclásicos. Otro plan que no te puedes perder es el impresionante Ateneo rumano: te garantizamos que entre los frescos de la bóveda y las sillas rojas aterciopeladas te quedarás sin palabras y sentirás que te has transportado a otra época. Otros lugares que merecen la pena una visita son la Plaza de Revolución y la Plaza de la Universidad, hojear un libro en Carturesti, considerada una de las librerías más bellas del Mundo o descansar en una de las terracitas del Pasaje Macca Vilacrosse y su techo acristalado. Dale una oportunidad a Bucarest, es un imprescindible que ver en Rumanía.
Transilvania
Transilvania es un indiscutible imprescindible a ver en Rumanía y una de las regiones más turísticas del país. Si cuando piensas en Transilvania te vienen a la cabeza castillos sombríos entre la niebla te llevarás una gran sorpresa al ver lo verde y colorida que es.
A continuación te hablamos sobre algunos de los lugares más icónicos de esta región
Bran y el famoso castillo de Drácula
El famoso Castillo de Bran (conocido como el castillo del Conde Drácula) te transportará a la famosa novela de Bram Stoker por su aspecto tétrico desde lo alto de una imponente roca, aunque nada más lejos de la realidad histórica… Si de verdad quieres conocer el lugar donde nació Vlad Tepes, el personaje real que inspiró al Conde Drácula, tendrás que ir hasta la bella Sighisoara.
Incluso si eres de los más atrevidos puedes disfrutar de una de las visitas que organizadas al Castillo de Bran. ¿Te atreves a hacer un tour nocturno privado por sus pasillos y habitaciones?
Sighisoara
Sighisoara es una pequeña ciudad de estrechas y coloridas callejuelas. Por algo su centro histórico es patrimonio de la UNESCO: las vistas de los tejados puntiagudos multicolores entre el verde desde la Torre del Reloj son de las más bellas que verás en la región.
Es una de las pocas ciudades fortificadas de esta zona de Europa que sigue habitada, y fue precisamente aquí donde nació y vivió los primeros años Vlad Tepes, el personaje en el que se inspira el Conde Drácula.
Rasnov
Aunque para vistas las que la ciudadela de Rasnov ofrece sobre los montes Cárpatos no tienen nada que envidiar. La ciudadela medieval en ruinas todavía se encuentra fuera del circuito turístico típico por la región y bien merece una visita.
Sibiu
Cuando llegues a Sibiu te sentirás muy observado porque las casas tienen ojos en sus tejados, como si te siguieran mientras te tomas algo en alguna de sus tres plazas (como la cosmopolita Piata Mare o “plaza grande”).
Podrás subir a ver las vistas de la ciudad desde la Iglesia o desde la Council Tower, visitar la impresionante Catedral de la Santísima Trinidad, perderte por las callejuelas del casco antiguo y desafiar la leyenda en el Puente de las Mentiras (que dice que si mientes mientras cruzas el puente, ¡se cae!)
Cluj-Napoca
Para un mayor anonimato, piérdete en las calles de la bohemia Cluj-Napoca, de ambiente universitario donde será difícil decidir dónde comer, cenar o qué exposición elegir. La ciudad es una de las más pobladas de Rumanía, conocida también como el corazón de Transilvania, y fue parte del imperio austro-húngaro (verás muchos edificios con influencia húngara, y sus habitantes además de rumano todavía hablan también húngaro y alemán). Es uno de nuestros lugares favoritos que ver en Rumanía.
Todos los lugares de interés están cerca, así que los puedes ver en un día, caminando: la icónica Plaza de la Unión con la Iglesia de San Miguel (uno de los monumentos más importantes en la ciudad), el palacio Bánffy (ahora convertido en el museo de arte de la ciudad), el monumento a Matia Corvin (antiguo rey de Hungría) o la plaza Avram con su catedral Nuestra Señora de la Asunción (ortodoxa).
Brasov
Brasov es una bella ciudad de edificios coloridos rodeados de un frondoso y abundante verde, en el cual… habitan ¡osos pardos! Si tienes “suerte”, puedes llegar a ver alguno por la noche, cerca de la ciudad.
Desde muchos rincones de la ciudad podrás ver las letras hollywoodescas con su nombre y aquí también tendrás todos los lugares de interés concentrados alrededor del centro: su plaza principal (Sfatului) llena de terrazas, restaurantes y tiendas, la Iglesia Negra (llamada así debido a un incendio provocado por las fuerzas invasoras austriacas), la calle Sforii (una de las más estrechas de Europa) y la calle Strada Republicii, la calle comercial de Brasov. También merece la pena subir hasta Torre Blanca para disfrutar de unas increíbles vistas de la ciudad y sus alrededores.
Transfagaraşan Road
Famosa por ser considerada la mejor carretera del Mundo por el programa de televisión Top Gear, esta carretera llena de curvas y vistas impresionantes es un imprescindible que ver en Rumanía si te gusta conducir y/o la naturaleza.
Son unos 90 kilómetros con una altitud de hasta 2000 metros, en la que además de disfrutar de la conducción y las vistas, podrás hacer varias paradas, siendo una de las más típicas la de visitar el lago Balea, un lago de origen glaciar situado a 2034 metros de altitud. Allí mismo podrás dormir en un alojamiento bastante curioso, el Ice Hotel, reconstruido cada año con hielo del propio lago.
Eso sí, tu visita a la Transfagaraşan Road tiene ser planificada con tiempo: sólo abre en verano, y si te quieres alojar en el hotel de hielo tienes que reservar con mucha antelación.
Delta del Danubio
¿Sabías que en Rumanía se encuentra una de las áreas más biodiversas del Mundo? Bienvenido al Delta del Danubio, ideal para estar inmerso en la naturaleza y bajar el ritmo en tu itinerario de viaje a Rumanía.
El Delta del Danubio es generado por la desembocadura del río Danubio y gracias a los sedimentos que arrastra el mismo, es una explosión de vida. Crece unos 40m2 por año (ganando terreno al mar negro) y es por lo tanto “la tierra más nueva” de Europa.
No hay a penas carreteras, por lo que el medio de transporte más común es el barco, y los planes en el delta son pura naturaleza: podrás conocer Letea Forest (el bosque sub-tropical más al norte del Mundo, donde habitan caballos salvajes y robles centenarios), navegar en pequeños barcos a remo por los canales más pequeño (donde es más fácil apreciar la fauna), ver increíbles amaneceres y atardeceres (acompañados de los sonidos de las aves) y por supuesto, hacer algún tour de “bird-watching” (donde un guía local te contará por qué hay tantos pelícanos por allí, y te ayudará a conocer al resto de especies que verás en la zona, como los cisnes y cormoranes).
Mar Negro
Si eres de los que les gusta incluir siempre unos días de playa en tu itinerario, en Rumanía el Mar Negro tiene playas para todos los gustos. Desde las más fiesteras y turísticas en Mamaia (cerca de Constanza), pasando por playas más salvajes y vírgenes de camino al sur (por la zona de Eforie) hasta Vama Veche, ya en la frontera con Bulgaria, un destino turístico muy solicitado entre la población rumana y una mezcla ambiente fiestero con ambiente hippy y chill out.
Maramures y Bucovina
Si te quieres escapar de los lugares turísticos de Rumanía, te recomendamos visitar estas dos regiones al norte del país: Maramures y Bucovina.
Maramures es conocida por ser una de las regiones más tradicionales de Rumanía y también por sus iglesias de madera: te sentirás como en un viaje al pasado, podrás visitar algunas de sus 40 iglesias de madera (8 de ellas son patrimonio mundial de la UNESCO) y conocerás a unas de las personas más amables del país.
Bucovina, por su lado, es una región conocida por sus monasterios pintados: una veintena de monasterios con coloridas iglesias en su interior y cuyas paredes (tanto interiores como exteriores) están bellamente decoradas con coloridas pinturas murales. 8 de ellos son también patrimonio mundial de la UNESCO, por lo que puedes hacer un buen roadtrip pasando por todos ellos.
Sabemos que ya estás pensando en planificar tu viaje a Rumanía, aquí encontrarás una selección de las mejores actividades para que puedas ir organizando tus próximas vacaciones. Y para que no tengas que preocuparte de nada, te recomendamos que contrates una tarjeta eSIM con datos ilimitados.
Artículo escrito por Inês Nunes de Randomtrip.es
4 comentarios en “Más de 10 lugares imprescindibles que ver en Rumanía”
Siempre recomiendan el castillo de Bran, es una perdida de tiempo, mejor el castillo de Peles en Sinaia
Gracias por tu aporte, Andrés.
me encantaría conocer esos lagares
Toda la razón Ándres. El castillo de Bran no tiene nada de interesante.