Cuando te plantees un viaje a Belfast, debes saber que quedaron muy atrás los tiempos en los que la capital de Irlanda del Norte era una ciudad industrial y políticamente dividida, con unas calles grises y peligrosas que no invitaban a recorrerlas. Décadas más tarde, entre las muchas cosas interesantes que ver en Belfast hay lugares que forman parte de ese pasado, pero para recordar lo que no debe volver a suceder mientras mantiene su paso firme hacia un futuro armonioso y vanguardista.
La Belfast actual posee animadas zonas de compras, verdes parques en los que disfrutar de los ansiados días soleados, míticos pubs, museos de primer orden y muchas otras cosas interesantes que te invitan a visitarla para pasar un gran fin de semana.
Estos son algunos de los mejores planes que hacer en Belfast.
Contenidos
- 1 Inmersión en la tragedia del Titanic: Titanic Belfast
- 2 El tour en los taxis negros: una puerta al pasado de Belfast
- 3 Pasear por el Jardín Botánico
- 4 Explorar los pubs de Belfast
- 5 Vida local en el mercado de St George
- 6 Arte y vida nocturna en Cathedral Quarter
- 7 Belfast con niños: Colin Glen Forest Park
- 8 Visitar el Castillo de Belfast
- 9 Escapadas alrededor de la capital
- 10 Degustar la gastronomía de Belfast
Inmersión en la tragedia del Titanic: Titanic Belfast
No es sólo uno de los mejores lugares que ver en Belfast, sino uno de los mejores museos del Reino Unido.
El Titanic Belfast te sorprende incluso desde antes de acceder al magnífico edificio que alberga la exposición. Se levantó imitando la silueta de la proa de un barco. Y es que, en su interior se cuenta, al mínimo detalle, la corta y trágica historia del transatlántico más famoso de la historia: el RMS Titanic.
La creación del Titanic fue encargada por la naviera White Star Line a los astilleros de Harland & Wolff, de Belfast. La labor llevó 3 años, de 1909 a 1912. El famoso barco formaba parte de un excelso trío de transatlánticos de lujo, completado por el RMS Olympic y el HHMH Britannic. Este último, curiosamente, también se hundiría, en 1916, al impactar con una mina naval alemana. Se utilizó durante la Primera Guerra Mundial como barco hospital.
La exhibición del Titanic Belfast incluye antiguos carteles de White Star Line, un paseo en vagoneta por una simulación de los astilleros donde se construyó el Titanic, hologramas que reproducen los camarotes y otras estancias del lujoso barco, testimonios de los supervivientes, narración de los mensajes de radio durante el momento de la tragedia…Y mucho más.
Saldrás de allí con los pelos de punta. Un lugar donde, inevitablemente, afloran las emociones.
El tour en los taxis negros: una puerta al pasado de Belfast
Una de las actividades más clásicas que hacer en Belfast es un recorrido en los taxis negros (black cabs) de la capital norirlandesa. Estos ofrecen una forma única de explorar la rica historia y cultura de la ciudad.
Estos recorridos suelen estar dirigidos por guías locales que han vivido los tiempos tumultuosos de The Troubles (el conflicto armado norirlandés entre unionistas y republicanos irlandeses, o católicos y protestantes), brindando relatos de primera mano e historias personales que dan vida al pasado de Belfast.
Los recorridos cubren lugares importantes, incluidos los Muros de la Paz, murales políticos y lugares clave de eventos históricos.
Esto te permitirá tener una profunda idea de las comunidades católica y protestante, así como del proceso de paz. El ambiente íntimo de un taxi negro permite experiencias personalizadas, con oportunidades para hacer preguntas e interactuar directamente con el guía.
Este enfoque inmersivo hace que los recorridos en taxi negro sean una actividad muy recomendada si buscas comprender en profundidad las complejidades de la historia de Belfast y su presente.
Pasear por el Jardín Botánico
Probablemente una de las mejores cosas que hacer en Belfast, al menos para los amantes de la naturaleza, es pasear por el Jardín Botánico.
Este lugar, con fácil acceso desde el centro de Belfast fue fundado en 1828 justo al lado de la Queen’s University y del Museo del Ulster. Sin embargo, no se abriría al público general hasta 70 años más tarde.
Hogar de una gran selección de plantas y árboles; incluido el carpe y el roble, es el tipo de lugar donde puedes pasear durante horas sintiendo que te encuentras muy lejos de la ciudad.
La gran atracción aquí es la Casa de las Palmeras. Fue construida a mediados del siglo XIX y posee el honor de ser uno de los primeros invernaderos curvilíneos del mundo.
Explorar los pubs de Belfast
Tanto si eres un amante de la vida nocturna como si no, explorar los pubs es algo que no puedes dejar de hacer en Belfast. Algunos de ellos son auténticos templos históricos.
La vida nocturna de Belfast es vibrante, con una variedad de pubs para todos los gustos.
El Crown Liquor Saloon es una visita obligada, conocido por su impresionante arquitectura victoriana y su animado ambiente. El Duke of York, ubicado en el Barrio de la Catedral, ofrece una experiencia de pub tradicional irlandés con música en vivo y una amplia selección de whiskies. Además, tiene una historia increíble, pues fue un pub durante dos siglos, hasta que fue destruido por una bomba en 1972.
Para los entusiastas de la cerveza artesanal, The Woodworkers ofrece un ambiente moderno con una selección rotativa de cervezas locales. The Spaniard, un acogedor bar conocido por su decoración ecléctica y su extensa carta de ron.
Vida local en el mercado de St George
El mercado de St. George es uno de los lugares más preciados que ver en Belfast y un destino de visita obligada tanto para los lugareños como para los turistas.
Fundado en el siglo XIX, es uno de los mercados victorianos mejor conservados del Reino Unido.
El mercado opera de viernes a domingo y cada día ofrece una experiencia única. Los viernes, puedes explorar el Variety Market, que ofrece de todo, desde antigüedades hasta productos frescos.
Los sábados están dedicados al mercado de alimentos y artesanías, todo ello aderezado con música en vivo.
El mercado dominical combina lo mejor de ambos, añadiendo un ambiente más relajado. Con su vibrante combinación de puestos, entretenimiento en vivo y ambiente histórico.
Arte y vida nocturna en Cathedral Quarter
El Barrio de la Catedral (Cathedral Quarter) de Belfast es una zona animada conocida por su vibrante escena artística y su encanto histórico.
Aquí encontrarás la Catedral de Santa Ana, un impresionante hito arquitectónico con hermosos mosaicos y la Aguja de la Esperanza, una gran aguja de acero que se agregó en 2007 y que cuelga sobre la sillería del coro, perforando el techo de la catedral y extendiéndose hacia el cielo, simbolizando el progreso y la creciente prosperidad de Irlanda del Norte en un momento en que Belfast estaba creciendo con dinamismo.
El área también alberga el MAC (Centro Metropolitano de Artes), que ofrece exposiciones de arte contemporáneo, representaciones teatrales y talleres.
Si te gusta el arte urbano, podrás disfrutar de los numerosos murales y obras de arte públicas repartidos por todo el barrio.
Para cenar y disfrutar de la vida nocturna, el Duke of York y el Harp Bar ofrecen música tradicional irlandesa y un ambiente acogedor.
Además, las estrechas calles adoquinadas están repletas de extravagantes tiendas, cafés y galerías, lo que convierte al Barrio de la Catedral en un centro cultural que ver en Belfast para la exploración tanto de día como de noche.
Belfast con niños: Colin Glen Forest Park
Si estás buscando cosas divertidas que hacer en Belfast con niños, vale la pena echarle un vistazo al Gruffalo Trail en Colin Glen Forest Park.
Esta es una incorporación reciente al parque y ahora una de las actividades familiares más populares en Belfast.
El sendero es el hogar de cada uno de los coloridos personajes del libro ilustrado, The Gruffalo (un libro infantil ilustrado que fue un auténtico éxito en el Reino Unido tras su publicación en 1999), que cobran vida como esculturas a lo largo del sendero.
Además, en el parque se organizan un sinfín de emocionantes actividades de aventura al aire libre, como tirolinas, senderismo y paseos por las copas de los árboles por pasadizos de cuerdas.
Visitar el Castillo de Belfast
Otro de los mejores lugares que ver en Belfast es su castillo.
Es una de las fortalezas más impresionantes de Irlanda del Norte, pareciendo haber sido sacada de un cuento de hadas.
Situado en la parte baja de las laderas de las colinas que pueblan el parque rural Cave Hill, el castillo y sus terrenos albergan una gran cantidad de vida silvestre, desde búhos chicos, gavilanes y la planta más rara de Belfast, el reloj del ayuntamiento.
El primer castillo de Belfast fue construido por los normandos en el centro de la ciudad a finales del siglo XII. Ya en 1611, Sir Arthur Chichester, barón de Belfast, levantó un segundo castillo, hecho de piedra y madera, en el mismo sitio.
Desde el castillo tendrás vistas panorámicas de la ciudad y el puerto. Está abierto todos los días y la entrada es gratuita, pudiendo reservar visitas guiadas. El interior alberga una exposición sobre la historia del bastión defensivo y una tienda de regalos.
Escapadas alrededor de la capital
Aunque hay suficientes cosas que ver en Belfast como para pasar un par de días completamente ocupados, si tienes algo más de tiempo o quieres salir de la ciudad, hay planes ideales para escapadas de un día.
Un ejemplo de ello es la Calzada del Gigante, lugar declarado Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO que es famoso por sus formaciones de basalto únicas y su belleza natural.
El Castillo de Carrickfergus, una fortaleza normanda muy bien preservada, ofrece una inmersión en la historia medieval y vistas al mar.
Por último, el pueblo de Hillsborough, con su castillo y jardines, es ideal para pasear y conocer la historia local.
Degustar la gastronomía de Belfast
Por último, para conocer un lugar hay que ahondar en su gastronomía.
La gastronomía de Belfast refleja su rico patrimonio cultural y su moderna innovación culinaria.
Los platos tradicionales incluyen el Ulster Fry, un abundante desayuno que incluye pan de soda, pan de patata, tocino, salchichas y huevos; y estofado irlandés, elaborado con cordero, patatas y zanahorias. Otro favorito local es el champ, un reconfortante plato de puré de patatas con cebolletas.
Para disfrutar de las mejores experiencias gastronómicas, puedes visitar Ox, famoso por su menú de temporada y de origen local que le ha valido una estrella Michelin.
El Muddlers Club, en el Barrio de la Catedral, ofrece un ambiente íntimo para cenar con platos creativos que resaltan lo mejor de los productos irlandeses.
No puedes marcharte sin probar alguno de ellos. Te dejarán tan buen sabor de boca que antes de acabar el postre estarás planeando tu regreso a la capital de Irlanda del Norte.
Artículo escrito por David Escribano, de Viajablog