El país de la bota de Europa fue en 2023, con unos 57 millones de turistas extranjeros, la cuarta nación más visitada del mundo, solo superada por Estados Unidos, España y Francia. Y cuando te hablemos de algunos de los mejores planes que hacer en Italia, este dato no te parecerá nada exagerado.
Italia es un país diverso que tiene algo para cada viajero. Playas espectaculares, montañas en las que esquiar y practicar infinitas modalidades de actividades al aire libre, ciudades repletas de monumentos y museos, encantadores pueblos, una buena gastronomía, moda, bosques y mucho más.
Además, los contrastes son grandes, pudiendo parecerte que estás realizando un viaje distinto dependiendo si visitas la zona septentrional o la meridional. Y eso sin hablar de la mítica isla de Sicilia, que parece una república independiente, a medio camino entre África y Europa.
En resumen, Italia es un destino que no deja indiferente a nadie. Siempre querrás volver a por más. Para una primera visita, estas son algunas de las cosas imprescindibles que hacer en Italia:
Contenidos
- 1 Sumergirse en la histórica y fascinante Roma
- 2 Descubrir los canales de Venecia
- 3 Admirar el arte de la Galería Uffizi en Florencia
- 4 Pasear en barco por la costa de Amalfi
- 5 Hacer senderismo en Cinque Terre
- 6 Explorar las ruinas de Pompeya
- 7 Visitar la Torre de Pisa
- 8 Catas de vino en la Toscana
- 9 Recorrer la isla de Sicilia
- 10 Caminar por las calles de Matera
Sumergirse en la histórica y fascinante Roma
Explorar a fondo su capital debe encontrarse en el primer puesto de tu lista de cosas que hacer en Italia.
La ciudad fundada, según cuenta la leyenda, por Rómulo y Remo es una de las más bellas e interesantes del mundo.
Roma está llena de historia y encanto, con innumerables lugares que ver.
El Coliseo es uno de los monumentos más icónicos, símbolo del Imperio Romano y una maravilla arquitectónica.
Muy cerca de él se levanta el Foro Romano y el Palatino, que te permiten emprender un viaje en el tiempo al caminar entre las ruinas de lo que fue el corazón de la antigua Roma.
La Ciudad del Vaticano es otro punto imprescindible de la capital, donde la Basílica de San Pedro y la Capilla Sixtina, con los frescos de Miguel Ángel, deslumbran a todos los visitantes, sean de la religión que sean.
Tampoco puede faltar una visita a la Fontana di Trevi, donde, según manda la tradición, debes lanzar una moneda al agua para asegurarte el regreso a la ciudad.
Otros lugares icónicos en Roma son el Panteón, un antiguo templo romano convertido en iglesia, que impresiona con su cúpula monumental; el barrio de Trastevere, que ofrece un ambiente más bohemio, con calles empedradas y pequeñas trattorias donde disfrutar de la auténtica gastronomía romana; la Piazza Navona y la Plaza de España, donde se puede sentir el alma de la ciudad eterna.
Necesitarías varios días para rascar la superficie de la monumental Roma.
Descubrir los canales de Venecia
Venecia, situada al norte del país, es una ciudad única, famosa por sus canales y su atmósfera romántica.
Un paseo en góndola por el Gran Canal es una experiencia imprescindible a la hora de nombrar las mejores cosas que hacer en Italia. Así podrás disfrutar de las vistas de los palacios y puentes históricos de esa urbe que se mece sobre las aguas.
La Plaza de San Marcos es el corazón de Venecia. En ella se encuentra la imponente Basílica de San Marcos, un ejemplo espectacular de arquitectura bizantina, y el Campanile, que ofrece vistas panorámicas.
Cerca de la plaza, el Palacio Ducal impresiona con su arquitectura gótica y su historia como sede del poder veneciano. También es fascinante cruzar el Puente de los Suspiros, que conecta el palacio con la antigua prisión.
El Puente de Rialto, uno de los más antiguos de Venecia, es perfecto para disfrutar del bullicio de la ciudad y admirar el canal desde lo alto.
Sin embargo, lo que más te recomendamos es que te pierdas, sin rumbo definido, por el laberinto de calles y puentes de una ciudad que deja al lado su estela melancólica y romántica cuando llega el Carnaval. Si puedes elegir el momento para visitarla, ese es el mejor.
Admirar el arte de la Galería Uffizi en Florencia
Y si Venecia es una urbe impresionante, Florencia, también en el norte, no se queda atrás.
Allí encontrarás la Galería de los Uffizi, uno de los museos de arte más importantes del mundo, que alberga una colección incomparable de obras maestras del Renacimiento.
Al caminar por sus pasillos, encontrarás obras icónicas de artistas como Leonardo da Vinci, Miguel Ángel, Rafael y Botticelli. Una de las obras más destacadas de la galería es “El nacimiento de Venus” de Botticelli, una extraordinaria representación de la belleza mitológica. También puedes admirar obras como la “Anunciación” de Leonardo y “Tondo Doni” de Miguel Ángel, que muestran el genio de la época dorada del Renacimiento.
La galería está organizada cronológicamente, lo que te permite observar la progresión de estilos artísticos a lo largo de los siglos.
Además del arte renacentista, el museo también presenta esculturas clásicas y vistas impresionantes del río Arno y el Ponte Vecchio desde sus ventanas.
Es un imprescindible que hacer en Italia si te gusta el arte.
Pasear en barco por la costa de Amalfi
Un paseo en barco por la costa amalfitana es una de las mejores experiencias que hacer en Italia. Ponte tu gorra de capitán y prepárate a navegar por un litoral repleto de acantilados dramáticos, pueblos coloridos y aguas cristalinas.
Desde el mar, se pueden ver pueblos como Positano, con sus casas colgando de las laderas, y Amalfi, con su catedral y puerto encantador.
Además, podrás explorar grutas escondidas, como la famosa Gruta Esmeralda, y playas aisladas que son inaccesibles por tierra.
Muchas excursiones incluyen paradas para nadar en las aguas turquesas o para disfrutar de un almuerzo en un restaurante frente al mar.
Mires a donde mires, te encontrarás con un paisaje de una belleza espectacular, con montañas cubiertas de vegetación que descienden hacia el mar. Al atardecer, los colores del sol se reflejan en el agua, creando una atmósfera mágica e inolvidable.
Sin duda, es uno de los planes más románticos que hacer en Italia.
Hacer senderismo en Cinque Terre
Si te gusta la naturaleza y el senderismo tienes que acercarte a la zona de Cinque Terre.
Esta región de la costa de Liguria ofrece cinco pintorescos pueblos: Monterosso al Mare, Vernazza, Corniglia, Manarola y Riomaggiore.
Bellos senderos conectan estos pueblos a través de colinas, viñedos en terrazas y espectaculares miradores sobre el Mediterráneo.
La ruta más famosa es conocida con el nombre de Sentiero Azzurro. Recorre la costa y ofrece una caminata accesible para casi todo el mundo.
Si te gustan los desafíos de mayor nivel, prueba con la ruta que sube por las montañas situadas a la espalda de los pueblos. Durante la caminata, podrás disfrutar de paisajes únicos, como acantilados dramáticos y casas coloridas colgadas sobre el mar.
Además, cada pueblo tiene su encanto, con sus calles estrechas, pequeños puertos y deliciosa gastronomía local.
Explorar las ruinas de Pompeya
Si te gusta la historia, disfrutarás de muchos planes que hacer en Italia, pero casi ninguno se podrá comparar a la sensación de recorrer las ruinas de Pompeya, la localidad que fue arrasada por la erupción del Vesubio en el año 79 de nuestra era.
Recorriendo lo que quedó de Pompeya podremos apreciar cómo vivían los antiguos romanos antes de la erupción.
Esta ciudad, sepultada durante siglos bajo cenizas volcánicas, se encuentra extraordinariamente bien conservada, permitiéndonos caminar por sus calles como si el tiempo se hubiera detenido.
Los restos de casas, templos, teatros, tiendas y baños públicos muestran la vida cotidiana de una sociedad próspera.
Uno de los puntos más impactantes es el Foro, el corazón político y social de la ciudad, donde todavía se pueden ver las ruinas de edificios importantes.
También destacan las villas, con frescos bien preservados, como la Casa de los Vettii; y los moldes de cuerpos de víctimas, que capturan el último momento de sus vidas.
A través de las excavaciones, Pompeya ofrece una visión detallada y conmovedora de la vida y la tragedia de una ciudad milenaria, convirtiéndola en un sitio arqueológico único en el mundo.
Visitar la Torre de Pisa
La Torre de Pisa es uno de los monumentos más curiosos que ver en Italia.
Esta famosa torre, situada en la Piazza dei Miracoli de la localidad de Pisa, es conocida por su inclinación, que comenzó durante su construcción, en el siglo XII, debido a un suelo inestable.
A pesar de este defecto – o, más bien, gracias a él – la torre se ha convertido en uno de los monumentos más reconocibles del mundo. Subir sus 294 escalones ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad de Pisa y sus alrededores.
La estructura de mármol blanco, con sus elegantes arcos y columnas, es un ejemplo destacado de la arquitectura románica.
Además, la Torre de Pisa forma parte de un conjunto monumental, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, que incluye la Catedral de Pisa, el Baptisterio y el Camposanto.
Catas de vino en la Toscana
La Toscana es uno de los destinos más prestigiosos del mundo para los amantes del vino, y una cata de los caldos del dios Baco en esta región es una experiencia inolvidable.
Con paisajes de colinas onduladas, viñedos que se extienden hasta donde alcanza la vista y bodegas centenarias, la Toscana ofrece una inmersión total en la cultura vinícola italiana.
Entre las zonas más famosas se encuentran Chianti, Montalcino y Montepulciano, donde se producen vinos como el Chianti Classico, el Brunello di Montalcino y el Vino Nobile di Montepulciano.
Durante la cata, los expertos te suelen explicar los procesos tradicionales de elaboración, desde la cosecha hasta la fermentación, mientras disfrutas de degustaciones que suelen venir acompañadas de productos locales como quesos y embutidos.
Además, muchas bodegas ofrecen visitas guiadas por sus viñedos y antiguas instalaciones, lo que permite descubrir la historia y el arte que rodean la producción de estos exquisitos vinos.
Recorrer la isla de Sicilia
La isla de Sicilia te propone un viaje dentro de otro viaje. Es un lugar tan singular que te hará sentir que te encuentras a miles de kilómetros, no sólo de Italia, sino de cualquier otro lugar europeo. Y en eso, especialmente, reside su magia.
Sicilia es una isla rica en historia, cultura y paisajes deslumbrantes. En Palermo, su capital, la catedral y el mercado de Ballarò son esenciales, ofreciendo una visión vibrante de la vida local y la arquitectura normanda.
Catania, a los pies del majestuoso Etna, posee un bello casco antiguo y animadas plazas. El monte Etna, el volcán activo más grande de Europa, es ideal para excursiones y caminatas con vistas panorámicas impresionantes.
En el Valle de los Templos, en Agrigento, puedes maravillarte con las ruinas de templos griegos; mientras en Siracusa, la isla de Ortigia y el teatro griego son imperdibles. En Taormina, disfruta de la vista desde el antiguo teatro y relájate en las playas cercanas.
Sicilia también es conocida por su cocina, así que saborea platos locales como arancini y cannoli mientras exploras la isla.
Caminar por las calles de Matera
Matera, ubicada en la sureña región italiana de Basilicata, es famosa por sus “Sassi”, antiguas viviendas excavadas en la roca, que son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Al recorrer el Sasso Caveoso y el Sasso Barisano, puedes explorar estas casas-cueva que han estado habitadas desde tiempos prehistóricos. Entre las visitas imperdibles se encuentra la Casa Grotta, una vivienda tradicional restaurada, que muestra cómo vivían sus habitantes.
Otro punto destacado es la catedral de Matera, que regala bellas vistas sobre la ciudad y los Sassi.
También es recomendable visitar las iglesias rupestres, como Santa Maria de Idris, que están decoradas con frescos medievales.
Tal es la belleza de Matera, que ha sido escenario de varias películas, como “La Pasión de Cristo”, lo que añade una dimensión cinematográfica a su encanto.
Y si quieres rematar la faena durante tu visita, camina por sus calles al atardecer. Te enamorarás de Italia para siempre. Y en eso consiste viajar, ¿verdad?
Artículo escrito por David Escribano, de Viajablog