Qué hacer en Hiroshima en un día

Cualquier viaje a Japón debería incluir una visita a la ciudad de Hiroshima. Aunque Tokio y Kioto sean prioritarios, si al menos dispones de 15 días tienes suficiente para conocer los principales atractivos del país del sol naciente, donde para mayor tranquilidad te recomendamos con el mejor seguro de viaje para viajar a Japón.

Si no dispones de mucho tiempo te gustará saber qué hacer en Hiroshima en un día. Una ciudad que marca, que por desgracia pasó a la historia por ser la primera población sobre la que se lanzó una bomba atómica y que literalmente tuvo que resurgir de sus cenizas. Fue el 6 de agosto de 1945 cuando el ejército de Estados Unidos lanzó sobre ella la bomba Little Boy y cambió Hiroshima para siempre.

Pero hoy Hiroshima es un mensaje de paz al mundo, un ejemplo de lo que jamás tiene que volver a ocurrir y mucho más que el epicentro de una bomba nuclear. Si quieres conocer sus principales puntos de interés, te proponemos varios planes para hacer en Hiroshima en un día.

Reflexionar ante la Cúpula de la Bomba Atómica

Es posiblemente el lugar más impactante de Hiroshima, un lugar donde detenerse a reflexionar. La que se conoce como la Cúpula de la Bomba Atómica es el esqueleto del antiguo Pabellón de la Promoción Industrial de Hiroshima, un edificio que a pesar de la cercanía al epicentro de la bomba nuclear mantuvo su estructura en pie cuando todo lo demás desapareció a su alrededor.

Aunque hubo opiniones que defendieron su demolición para olvidar ese día fatídico, se decidió mantenerlo tal y como quedó tras la explosión para que siempre fuera recordada la tragedia que vivió Hiroshima. Desde 1996 la Cúpula de la Bomba Atómica es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.

Conocer la historia en el Museo Conmemorativo de la Paz

Otro de los imprescindibles de Hiroshima. El Museo Conmemorativo de la Paz de Hiroshima es un lugar que todo viajero debería visitar en su paso por Japón. Gracias a él puedes hacerte una una idea aproximada de la magnitud del ataque nuclear que vivió la ciudad. Cómo era, cómo quedó y cómo fue su proceso de recuperación tras la pérdida de varios miles de vidas humanas. Es un museo apto para todos los públicos y recibe numerosísimas visitas de colegiales a diario.

El Museo Conmemorativo de la Paz de Hiroshima puede ser duro, la exposición de fotografías y objetos personales de quienes perdieron la vida aquel día es estremecedora, así como los efectos de la radiación nuclear que vivió y vive la zona a pesar de los años. Pero igual de duro es ver cómo, a pesar de la tragedia, los países continuaron desarrollando su carrera nuclear hasta hoy día. Un museo triste, pero necesario.

Viajar protegido por Japón

A nivel de asistencia médica, Japón es uno de los países más caros del mundo. Un simple resbalón en Hiroshima podría traducirse en desproporcionadas facturas en centros médicos. Por ello, es normal que hasta el mismo Ministerio de Asuntos Exteriores insista en la importancia de contar con un seguro de viaje a Japón que te garantice estar protegido en todo momento. El IATI Estrella es el mejor seguro de viaje para este destino y gracias a sus elevadísimas coberturas médicas y otras enfocados a casos, por ejemplo, como robo, problemas con equipaje, pérdida/retraso de vuelos o repatriación estarás cubierto de inicio a fin de tu viaje. No esperes más, viaja con las mejores garantías y hazte ahora con tu seguro:

Pasear por el Parque Conmemorativo de la Paz

Todo el espacio que separa la Cúpula de la Bomba Atómica y el Museo Conmemorativo de la Paz lo ocupa el Parque Conmemorativo de la Paz, una zona verde por la pasear entre diferentes monumentos que recuerdan aquel momento.

• El Cenotafio de las víctimas de la bomba atómica. Un monumento en forma de arco bajo el que se recogen los nombres de todas las víctimas de la bomba, tanto las que fallecieron en ese momento como las que lo hicieron por sus efectos.
• La Llama de la Paz. Una pequeña llama que arde sin cesar desde que se encendió en 1964 y que lo seguirá haciendo hasta que no haya armas nucleares en el mundo.
• El Monumento a la Paz de los Niños. Lugar que recuerda la triste historia de la niña Sadako Sasaki, que siguiendo la tradición japonesa de hacer 1.000 grullas de origami para que se cumpla un deseo, murió diez años después de la explosión víctima de la radiación a pesar de haber superado el millar de grullas.

Visitar el Castillo de Hiroshima

Como puedes imaginar, el castillo original de Hiroshima de finales del siglo XVI quedó destruido tras la explosión de la bomba nuclear, y el que vemos hoy día es una reconstrucción de 1958 con estructura de cemento que hace de museo histórico de la ciudad. Comúnmente el castillo de Hiroshima es conocido como “La Carpa”.

Cuenta con exposiciones sobre la antigua ciudad de Hiroshima y sobre cómo era la vida en el castillo, con sus defensas y armas tradicionales, y además desde su último piso hace de mirador para contemplar unas buenas vistas de la ciudad. La imagen que deja la combinación del castillo, sus jardines y el río que pasa a su pie es una de las más bonitas de Hiroshima.

Relajarse en los Jardines Shukkeien

Si buscas un momento de relax a lo largo del día te recomendamos darte un paseo por los Jardines Shukkeien. Un parque que recoge diferentes elementos de la naturaleza como valles, montañas, lagos y bosques, con la perfección y minuciosidad escrupulosa que solo los japoneses saben aplicar en sus jardines.

Diferentes espacios en miniatura donde no faltan caminos, puentes y casas tradicionales de té por los que escabullirse del bullicio de la ciudad.

Curiosear por la calle Hon-dori

La calle Hon-dori es la calle comercial de Hiroshima por excelencia. Una calle peatonal y cubierta, infalible si te pilla un día de lluvia, y repleta de bares, tiendas, restaurantes, karaokes y establecimientos de pachinko, las inconfundibles salas de tragaperras japoneses. Un buen lugar en el que entretenerse y picar algo antes de poner rumbo a Okonomi-mura.

Probar un okonomiyaki en Okonomimura

Toma nota de esto, porque si vas a Hiroshima no puedes dejar pasar la oportunidad de tomarte un buen okonomiyaki, y el lugar perfecto para hacerlo es en Okonomimura.

Okonomimura significa literalmente “la ciudad del okonomiyaki”, y ya puedes imaginar por qué. Se trata de un edificio de varias plantas donde todos los establecimientos están especializados en elaborar okonomiyakis al estilo de Hiroshima, y cada uno le da su toque a su plato estrella. En total hay casi 30 restaurantes distintos y seguro que en ninguno de ellos te sabrá igual ¿te animas a comprobarlo?

Y si te sobra tiempo… ¡Miyajima!

Si querías saber qué hacer en Hiroshima en un día con todas las opciones que te hemos dado tendrás más que suficiente para completar tu visita, pero si te sobra tiempo o quieres prolongar un poco más tu estancia no deberías dejar de visitar Miyajima.

A media hora en tren desde Hiroshima y tras un trayecto de 10 minutos de ferry podrás llegar a la isla de Miyajima, un lugar que hace honor a su significado “la isla del templo”. El santuario de Itsukushima (el verdadero nombre de la isla) es uno de los templos sintoístas más bonitos del país, pero lo que te traerá hasta aquí será su gran torii rojo que se levanta sobre las aguas del mar a unos metros de la orilla. Esta puerta sagrada acuática dibuja una de las imágenes más famosas de Japón, por lo que si tienes tiempo suficiente… ¡ni lo dudes!

¿Todo listo para descubrir los rincones que ver en Hiroshima? Como sabemos que, además, vas a explorar mucho más en el país del sol naciente, hemos creado para ti estas 3 guías imprescindibles que harán mucho más fácil la organización de tu viaje, no te las pierdas:

 

Artículo escrito por Roberto Ruiz  de El Mundo Patas Arriba