Mozambique es uno de esos destinos de nuestro ancho y variado mundo que deja huella en todos los viajeros que llegan a explorarlo a fondo. Para que pases a formar parte de ese grupo, te vamos a dejar un completo itinerario por Mozambique de 21 días de viaje.
Este país del sur de África fue el primero del continente en el que los colonizadores europeos construyeron una edificación. El explorador que llegó a esta ínsula, en 1498, fue el portugués Vasco de Gama.
Fue este gran navegante quien bautizaría a Mozambique como “A terra da boa gente”, debido al carácter hospitalario y amable de los habitantes con los que se encontraron.
A día de hoy, ese apelativo sigue estando vigente.
Mozambique es un país que posee grandes atractivos naturales – selvas, grandes extensiones en las que habitan centenares de especies de animales salvajes, montañas, playas paradisíacas, islas rodeadas por fascinantes mundos submarinos y mucho más -, pero su mayor tesoro sigue siendo la gente que lo puebla.
Apenas visitado por el turismo internacional, los pocos avezados viajeros que se aventuran a recorrer este alargado país africano, se hallan acogidos por una alegría y calidez humanas difíciles de hallar en nuestras grises y apocadas sociedades occidentales.
Recorrer Mozambique por libre, eso sí, exige cierta paciencia. El transporte público es limitado y las carreteras no son las mejores. Eso lleva a que se tarden horas en recorrer distancias no demasiado largas. Otra opción es volar entre los distintos puntos de interés, pero así te pierdes conocer cómo es la vida real de los mozambiqueños a ras de suelo. Algo que tienes que experimentar para sentir el país a un nivel más profundo.
Lo ideal, para realizar una buena ruta por Mozambique, es combinar ambos medios de transporte, incluyendo el barco para excursiones puntuales por las maravillosas aguas del Índico.
En cuanto a la mejor época del año para llevar a cabo este viaje a Mozambique, lo ideal es entre mayo y noviembre, cuando las temperaturas no son demasiado altas y el clima es seco. De diciembre a abril es la estación lluviosa y algunas carreteras se pueden ver colapsadas.
Déjate poseer por la magia africana con este magnífico itinerario de 21 días por Mozambique:
Contenidos
- 1 Día 1 y 2: Llegada y visita a Maputo
- 2 Día 3, 4 y 5: Tofo
- 3 Día 6 y 7: Vilanculos y el archipiélago de Bazaruto
- 4 Día 8, 9 y 10: Parque Nacional de Gorongosa
- 5 Día 11, 12, 13 y 14: Gurué y trekking hacia el monte Namuli
- 6 Día 15, 16 y 17: Ilha de Mozambique
- 7 Día 18, 19 y 20: Pemba y el Parque Nacional de las Islas Quirimbas
- 8 Día 21: Regreso a Maputo y vuelta a casa
Día 1 y 2: Llegada y visita a Maputo
La capital del país, Maputo, es el punto de entrada principal a Mozambique.
Maputo es una ciudad caliente en todos los aspectos. No en vano, es conocida como la “Río de Janeiro de África” por su espectacular y divertida vida nocturna.
Pero, como buena capital africana, Maputo también es caos, coloridos mercadillos, humedad y manifiesta cierta presencia del legado colonial que dejaron los portugueses tras cinco siglos de ocupación. Parte de ese patrimonio es el Fuerte de Nossa Senhora da Conceição de Lourenço Marques, una fortaleza construida en el último cuarto del siglo XVIII.
Al caer el sol, llega el momento de dejarse llevar por los pegadizos ritmos musicales africanos en bares y discotecas como Opium, Leblon o Copa Cabana Night Club.
Casi todo el mundo pasa de puntillas por Maputo, pero es una ciudad lo suficientemente interesante como para dedicarle al menos un par de días. Sobre todo, si llegas a ella durante un fin de semana.
Día 3, 4 y 5: Tofo
Tras conocer la capital, llega el momento de continuar nuestra ruta por Mozambique dirigiéndonos hacia su bello litoral.
Una primera parada, tras unas 8 horas de viaje en autobús, nos lleva a conocer la pequeña localidad de Tofo.
Otrora un pueblo pesquero totalmente adormecido, Tofo notó cierto cambio en su tranquila existencia cuando, hace algo más de una década, los viajeros mochileros extranjeros lo descubrieron y lo declararon “paraíso terrenal”.
Desde entonces, a sus calles de arena se asoma algún que otro hostal, pequeñas agencias que organizan actividades en la zona, restaurantes, mercadillos y otros negocios turísticos.
Aquí puedes bucear en unas aguas de ensueño, recorrer la costa en kayak, hacer yoga, montar en quad o, simplemente, relajarte y disfrutar de playas espectaculares – como las de Barra o Tofinho – mientras conversas con la gente local y ves la vida pasar.
Un par de días aquí son necesarios en un buen itinerario por Mozambique.
Día 6 y 7: Vilanculos y el archipiélago de Bazaruto
Cogemos un autobús o una chapa – medio de transporte colectivo mozambiqueño que consiste en una destartalada furgoneta que tan sólo inicia el viaje cuando se encuentra totalmente llena de gente y bártulos – para recorrer los algo más de 300 km que separan a Tofo de Vilanculos.
Vilanculos es un pueblo pesquero algo más desarrollado que Tofo, pero mucho menos turístico y, por ende, más auténtico.
Además de recorrer sus calles y charlar con la gente en el mercado, lo mejor que puedes hacer en Vilanculos es explorar el bellísimo archipiélago de Bazaruto.
Formado por seis ínsulas – Bazaruto, Magaruque, Benguerra, Banque, Shell y Santa Carolina – con dunas, vegetación y playas vírgenes, el Parque Nacional de Bazaruto ofrece unas aguas transparentes en las que podrás admirar distintas formaciones de coral y decenas de coloridas especies de peces.
Sin embargo, la experiencia más cotizada es la de nadar junto a los moteados tiburones ballena. Este gigante de los océanos es un habitual de la zona, junto a tortugas bobas, mantarrayas, delfines y distintos tiburones de arrecife.
Para los amantes de la vida submarina, esta es una parada obligatoria en una ruta por Mozambique.
Día 8, 9 y 10: Parque Nacional de Gorongosa
Tras conocer la costa sur de Mozambique, llega el momento de poner rumbo noroeste y conducir unas 10 horas hasta los límites del Parque Nacional de Gorongosa.
Este parque nacional y los animales que lo habitaban sufrieron un gran daño durante la larga y sangrienta guerra civil mozambiqueña (1977-1992). Con el tiempo, las especies han sido reintroducidas y, hoy en día, aunque no ha alcanzado el esplendor de antaño, es un gran lugar para admirar a muchos de los protagonistas de la vida salvaje del sur de África.
Es recomendable incluirlo en tu ruta por Mozambique y quedarte un par de días observando impalas, antílopes, facóqueros, hipopótamos, elefantes y, si tienes suerte, algún león.
Si eres un amante de las aves, te gustará saber que aquí residen más de 300 especies diferentes, entre ellas varias endémicas y casi endémicas.
Día 11, 12, 13 y 14: Gurué y trekking hacia el monte Namuli
Necesitaremos otro día de camino para llegar a la ciudad de Gurué. Con algo más de cien mil habitantes, es una población importante en la provincia mozambiqueña de Zambezia y nos servirá de base para realizar uno de los trekkings más bellos en Mozambique: el que te lleva a ascender a la cima del monte Namuli.
El monte Namuli, con sus 2.420 metros de elevación sobre el nivel del mar, es el segundo pico más alto de Mozambique. Sin embargo, lo verdaderamente singular es que esta montaña es sagrada para los macuas, una etnia que habita en la zona.
Por ello, para ascender el monte es necesario pedir permiso a la jefa de la aldea que se encuentra en su base (es recomendable llevarle algunos presentes).
Esta ruta de senderismo, de unos 3 días de duración, es una experiencia inolvidable en tu itinerario por Mozambique. Atravesarás campos de cultivo, aldeas, ríos, colinas y todo ello sobre esa tierra rojiza que es la sangre de África.
No pierdas la oportunidad de interactuar con la gente en una de las zonas más auténticas y menos visitadas del país.
Día 15, 16 y 17: Ilha de Mozambique
Tras explorar el interior de Mozambique, llega el momento de regresar a la costa.
Para ello tendremos que atravesar Nampula y tomar la carretera que lleva a la Ilha de Mozambique.
Este lugar posee una gran importancia histórica, pues aquí se hallan las construcciones europeas más antiguas del continente africano. La capilla de Nuestra Señora del Baluarte, levantada por los portugueses en 1522, es, de hecho, el primer edificio europeo construido en el hemisferio sur.
Otro edificio a visitar en Ilha de Mozambique es el Fuerte de San Sebastián, que luce aún imponente a pesar de sus cuatro siglos de vida.
Ilha de Mozambique posee otra cara, mucho más decadente, pero igualmente bella. Hay muchas antiguas casas y palacetes – en gran parte, dejados y casi en ruinas – que permiten entrever su pasada época de esplendor, cuando aún era la capital del país bajo gobierno portugués.
Las playas también son atractivas, pero no poseen la belleza de las del norte o el sur del país.
En cuanto a la vida diaria, hay una mezcla entre extranjeros y habitantes locales que convierte a la isla en un lugar muy interesante y mestizo.
Día 18, 19 y 20: Pemba y el Parque Nacional de las Islas Quirimbas
La última parada en esta completa ruta por Mozambique nos lleva a Pemba, la ciudad que sirve de acceso al paraíso del Parque Nacional de las Islas Quirimbas.
El de las Quirimbas es un archipiélago formado por unas 20 islas e islotes, que se esparcen a lo largo de los casi 400 km de costa que separan a Pemba de Río Rovuma.
En él encontrarás aguas cristalinas, playas vírgenes, antiguas construcciones coloniales en estado de decadencia, manglares, bosques, gente amable y mucha tranquilidad.
Es el lugar ideal para relajarte en la playa, hacer snorkel, pasear en un dhow – barcos de vela con una tradición centenaria en la zona – y admirar las estrellas al caer la noche.
Las tres islas principales en las que alojarse son Ilha do Ibo, Matemo e Ilha de Quirimba.
Día 21: Regreso a Maputo y vuelta a casa
El archipiélago de las Quirimbas es el punto final ideal para un completo itinerario por Mozambique.
Ahora es momento de volar desde Pemba a Maputo y llevarte a casa, en la memoria, unos recuerdos imborrables de por vida.
Artículo escrito y fotos tomadas por David Escribano, de Viajablog