¿Quieres disfrutar de uno de los fenómenos naturales más bellos durante tu viaje por la isla del hielo y el fuego? Pues aquí te vamos a dejar los mejores consejos para ver auroras boreales en Islandia.
Las auroras boreales han tenido fascinado al ser humano durante milenios. Esas luces danzantes y coloridas que aparecen en los gélidos cielos invernales han sido interpretadas de decenas de maneras distintas desde el principio de los tiempos.
En el hemisferio norte, se pueden apreciar en algunos territorios septentrionales de los países cercanos al Círculo Polar Ártico. Islandia es uno de esos lugares.
Aunque no necesitas ninguna excusa extra para visitar Islandia – es un país repleto de volcanes, cascadas, glaciares, fiordos, playas infinitas y muchos otros atractivos naturales -, el hecho de poder ver auroras boreales es algo realmente excepcional.
Pero, ¿qué condiciones se tienen que reunir para que esto ocurra? ¿cómo y cuándo podrás verlas? Vamos a ayudarte a vivir una experiencia inolvidable con estos consejos para ver auroras boreales en Islandia.
Pero empecemos por el principio…
Contenidos
Qué son las auroras boreales y cómo se forman
Aunque fue el astrónomo italiano Galileo Galilei quien acuñó el nombre de “aurora boreal” en 1619 – en honor a la diosa romana del amanecer, Aurora, y al dios griego del viento del norte, Boreas – el primer registro que puede indicar la existencia de este fenómeno se encontró en unas pinturas rupestres, de 30.000 años de antigüedad, ubicadas en una cueva francesa.
Desde entonces, las civilizaciones de todo el mundo se han maravillado con este fenómeno celestial, atribuyendo todo tipo de orígenes mitológicos a las luces danzantes.
Por ejemplo, los vikingos (primeros pobladores de Islandia) pensaban que el fenómeno era la luz que se reflejaba en la armadura de las valquirias, las doncellas sobrenaturales que llevaban a los guerreros caídos al más allá.
Los primeros astrónomos también mencionaron la aurora boreal en sus registros. El astrónomo real del rey de Babilonia Nabucodonosor II, inscribió su informe del fenómeno en una tablilla que data del 567 a.C.
La ciencia detrás de la aurora boreal no se teorizó hasta principios del siglo XX. El científico noruego, Kristian Birkeland, propuso que los electrones emitidos por las manchas solares producían las luces atmosféricas después de ser guiados hacia los polos por el campo magnético de la Tierra.
La teoría resultaría correcta.
El sol expulsa partículas cargadas de su corona, o atmósfera superior, creando lo que se llama viento solar. Cuando ese viento golpea la atmósfera superior de la Tierra nace la aurora. En el hemisferio norte, el fenómeno se denomina aurora borealis, mientras que en el hemisferio sur se denomina aurora australis.
Los colores brillantes de la aurora boreal vienen dictados por la composición química de la atmósfera terrestre.
Y es que, aunque estamos acostumbrados a ver las fotografías de auroras boreales verdes, lo cierto es que también pueden ser rojizas o azuladas.
Cuáles son las mejores condiciones para ver auroras boreales
Entre los consejos para ver auroras boreales en Islandia no puede faltar el dedicado a contarte cuáles son las mejores condiciones para poder admirar este maravilloso fenómeno natural.
Lo primero que hay que tener claro es que el fenómeno de las auroras boreales está presente durante casi todo el año. Es decir, el viento solar que las origina es muy constante.
Sin embargo, durante los meses del verano boreal, no podremos verlas debido a las escasas horas de oscuridad que se dan en el hemisferio norte.
Para ver auroras boreales con cierta claridad e intensidad, necesitamos que los cielos estén despejados; no estar cerca de focos de contaminación lumínica; y que la noche no presente una exposición lunar alta.
En cuanto al frío, no influye para nada en la visualización de auroras boreales. Lo único que ocurre es que las noches de cielos despejados suelen ser más frías y la gente ha tendido a relacionar las bajas temperaturas con una buena visibilidad del fenómeno.
Cuándo es el mejor momento del año para ver auroras boreales en Islandia
Uno de los más fundamentales consejos para ver auroras boreales en Islandia es cerciorarte de que viajas al país en el momento más propicio posible.
La mejor época para ver auroras boreales en Islandia es entre los meses de septiembre y marzo. Sin embargo, aunque ya se pueden apreciar algunas auroras desde finales de agosto, tendrás los días de mayor oscuridad en noviembre, diciembre y enero.
Cómo puedo saber si veré auroras boreales en Islandia
Ver auroras boreales en Islandia – o en cualquier otra parte del mundo – no es una ciencia cierta.
De hecho, existen viajes organizados para “cazar” auroras en los que los viajeros regresan a casa con las manos vacías.
Estar en el lugar adecuado en el momento correcto ayuda. Por ejemplo, tendrás muchas más posibilidades si te encuentras en el norte de Islandia en diciembre.
A pesar de la incertidumbre general, hay previsiones disponibles.
El índice Kp generalmente se considera el más preciso. Es mucho más fiable que el pronóstico del tiempo.
Se trata de un índice magnético planetario que se mueve en una escala del uno al nueve, siendo uno actividad muy baja y nueve muy alta.
El Instituto Geofísico de la Universidad de Alaska tiene un excelente sitio web que te permite ver la actividad pronosticada en todas las regiones aurorales. También puedes registrarte para recibir alertas por correo electrónico cuando la actividad aumenta por encima de cuatro o cinco en la escala Kp.
Otra forma de conseguir una buena información sobre la probabilidad de auroras boreales en Islandia es utilizar algunas de las apps destinadas a “cazarlas”. My Aurora Forecast es una de las mejores y más populares.
Los mejores lugares de Islandia para ver auroras boreales
Y ahora que ya te hemos hablado sobre el origen de las auroras boreales, las condiciones para verlas y cómo pronosticarlas, vamos a contarte cuáles son los mejores sitios para verlas durante tu viaje a Islandia.
Estos son algunos de los puntos preferidos por los auténticos expertos: la gente local.
La montaña de Kirkjufell, Península de Snaefellsnes
Desde su aparición en la famosa serie de HBO, ‘Juego de Tronos’, la montaña de la Iglesia (o Kirkjufell, en islandés) es uno de los iconos paisajísticos de Islandia.
Esta pequeña montaña, de 463 metros de altura, se encuentra rodeada de un bello paisaje que incluye la cascada de Kirkjufellsfoss. Es uno de los lugares donde todo el mundo se detiene cuando recorre la bella península de Snaefellnes, situada a unas 3 horas en coche de Reikiavik y que reúne al menos una muestra de cada uno de los atractivos naturales que ver en Islandia.
Cada invierno, son muchos los aventureros que se acercan a la montaña para obtener fotografías inolvidables de las auroras boreales en Islandia.
El Parque Nacional de Thingvellir
El Parque Nacional Thingvellir parece haber sido diseñado a medida como telón de fondo para ver auroras boreales en Islandia.
Situado a unos 45 minutos de Reikiavik, aquí encontrarás un paisaje dramático de rocas de lava y musgo, grietas, lagos y zonas verdes, que sirve de marco ideal para ver las luces de las valkirias.
El cañón de Asbyrgi
Cerca de la ciudad norteña de Húsavik se encuentra el cañón de Ásbyrgi, que significa Refugio de los Dioses.
Este cañón se formó tras la erupción de un volcán subglaciar, que derritió el hielo y provocó una avalancha de agua que horadó las paredes rocosas.
Aquí encontrarás uno de los escasos bosques primigenios que quedan en Islandia. Éste se halla en una zona en las que paredes volcánicas dibujan un recinto con forma de herradura. Para explicar su morfología, hay una leyenda islandesa que cuenta que allí pisó el caballo de Odín, Sleipnir.
Hay pocos lugares más místicos y especiales para ver auroras boreales en Islandia que este Refugio de los Dioses.
Fiordos del oeste
Es difícil encontrar un lugar que supere a los fiordos del oeste como punto de observación de auroras boreales en Islandia.
Las razones son sencillas. Se encuentran en el extremo noroeste del país (muy cerca del Círculo Polar Ártico) y apenas hay contaminación lumínica, pues es un área con una densidad de población realmente baja.
Aquí podrás ver las luces danzantes con impresionantes fiordos, playas, cascadas, antiguos campos de lava y glaciares de fondo.
Las playas de Vík y el lago glaciar de Jökulsárlón
En el sur, un gran lugar para ver auroras boreales en Islandia son las magníficas playas de arena negra que se hallan cerca de la turística población de Vík.
La más famosa de ellas – de nuevo, gracias a ‘Juego de Tronos’ – es la de Reynisfjara, con los farallones de roca volcánica erigiéndose en el mar, las bravas olas oceánicas, las grises piedras de la orilla y su montaña basáltica, con cuevas y tapizada de una esplendorosa alfombra verde.
Otro maravilloso punto de observación en la zona es el acantilado sobre el que se asienta el faro de Dyrhólaey. Las vistas aquí son de otro planeta, sobre todo cuando las luces verdes boreales tiñen el cielo.
En el sureste del país, la laguna glaciar de Jökulsárlón es uno de los lugares más visitados de Islandia. En ella, enormes bloques de hielo azulado sirven de lugar de descanso a las focas que se acercan por el estrecho canal que une al lago con el océano.
Si este sitio luce hermoso en cualquier momento del año, bajo las luces boreales se crea una imagen que nunca olvidarás.
Artículo y fotos por David Escribano, de Viajablog.