Cuando piensas en viajar a Bolivia ¿qué es lo primero que te viene a la cabeza? Probablemente estés pensando en el impresionante “Salar de Uyuni”, el mayor desierto de sal del Mundo con 10.582 Km2, su increíble isla de Incahuasi y sus cactus milenarios y las tropecientas fotos de perspectiva que dan mucho juego e inundan las redes sociales. Desde IATI, expertos en seguros para el viajero, nos hemos propuesto enseñarte que Bolivia es todo eso y mucho más. Por eso, te traemos unos cuantos motivos más para visitar uno de los países más indígenas de América.
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Copacabana
Homónima a la famosa playa brasileña de Rio de Janeiro, esta localidad boliviana será uno de los puntos más curiosos por los que pasarás en tu viaje a Bolivia. Sentirás que estás en una playa a 3810 metros de altura cuando en realidad lo que ves no es el mar (aunque lo parezca) sino el inmenso lago Titicaca, que comparte con su vecino Perú. Las vistas de esta playa de agua dulce desde el mirador del Cerro El Calvario son impresionantes y un imperdible que ver en Copacabana. Después de una subida de poco más de media hora contemplarás desde lo alto el que es lago navegable más alto del Mundo. Y será precisamente navegando desde Copacabana que llegarás a sus dos perlas: la isla del Sol y la isla de la Luna.
Isla del Sol e Isla de la Luna
Tanto por sus paisajes impresionantes como por ser uno de los centros espirituales más importantes de la región andina, la visita a estas islas es imprescindible al planificar tu itinerario por Bolivia. A menos de 2 horas de Copacabana llegarás a la isla del Sol, la más grande del lago Titicaca y en la que empezó la fundación de la dinastía inca. Aparte de poder conocer el llamado complejo ritual de la Roca Sagrada, la Mesa Ritual y las Ruinas de Chinkana en la parte Norte, uno de los platos fuertes de la isla es despedirse del sol en el mirador en la comunidad de Yumani, en la parte Sur. Y es que sus atardeceres son uno de los motivos que hacen que gran parte de los visitantes decidan pasar al menos una noche un uno de los hostales que ofrece esa misma comunidad.
La isla de la Luna es la segunda isla sagrada de los incas. Más pequeña, menos turística y más auténtica, la mayoría de visitantes hacen una corta parada en la isla de la Luna de camino a la isla del Sol para visitar el Palacio de las Vírgenes. Pero caminar hacia una de sus puntas saludando a alguna que otra habitante con su llama por el camino, respirar bien hondo ante la inmensidad del Titicaca y sentir la tranquilidad es el mejor plan que hacer por allí. Indudablemente el lado boliviano del lago Titicaca es toda una sorpresa que no te querrás perder.
Viajar seguro por Bolivia
Ya estás viendo la enorme cantidad de planes diferentes que te esperan aquí, ¿verdad? Para disfrutarlo al máximo, necesitas saber que estarás en las mejores manos en todo momento y con las mayores protecciones. Un accidente recorriendo las carreteras del país, una enfermedad grave, el mal de altura o un tonto esguince podrían derivar en carísimas facturas en centros médicos privados. Por ello, hoy en día es ya imprescindible visitar el país contando con el mejor seguro de viaje a Bolivia.
El IATI Mochilero es el mejor para este destino. Además de su enorme colchón par asistencia sanitaria, que te garantiza el acceso a los mejores especialistas sin que tengas que pagar nada de tu bolsillo, te protege también con una serie de coberturas top escogidas para una aventura como esta. Como las dirigidas a casos de robo, problemas con tu equipaje, incidentes con tus transportes o incluso la repatriación a tu casa.
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La Paz
Frecuentemente confundida como la capital del país, pasarás por este centro político (ya que aquí reside el presidente de la República y se encuentran las sedes del poder ejecutivo y legislativo) en tu viaje a Bolivia. Después de aclimatarte a los más de 3000 metros de altitud de una de las ciudades más altas del Mundo, el mejor plan para hacer por La Paz es perderte por el centro histórico donde se destacan las polleras multicolor de las vendedoras de los puestos de comida, bebida o artesanía en las calles alrededor de la basílica de San Francisco. No podrás perderte el curioso Mercado de las Brujas donde encontrarás miles de pociones y hechizos, la famosa Plaza Murillo y la estrecha calle Jaén (la más bonita de todas y un imperdible que ver en Bolivia). Prueba el moderno teleférico para contemplar La Paz desde el El Alto (a más de 4000m de altitud) y termina con una vista de 360º en el mirador Killi Killi, saludando desde arriba al monte Illimani y su pico nevado.
La Carretera de la Muerte
Si te gustan las aventuras cargadas de adrenalina, no puedes ir a La Paz y no dedicar al menos un día a descender por esta carretera. No te asustes con el nombre, es cierto que fue célebre por su peligro extremo y por el nº de muertes en accidentes de tráfico pero, a día de hoy ,no es así. Ahora es una ruta turística y un planazo que hacer en Bolivia, sobre todo en bicicleta. Las vistas que ofrece el camino y las paradas que vas haciendo por la naturaleza compensan totalmente las agujetas con las probablemente acabarás después de más de 50 km, casi todo en bajada eso sí.
Sucre
La que es la capital constitucional de Bolivia (y donde se encuentra la sede del poder judicial) es una sorpresa de blancas calles coloniales y ambiente vibrante. Lo mejor que hacer por Sucre es callejear por el centro: sentarse en la plaza 25 de Mayo, admirar la catedral y entrar en la Casa de la Libertad, otro de los edificios emblemáticos donde se firmó el acta de independencia de Bolivia. Para el atardecer nada mejor que subir hasta el Mirador de la Recoleta y ver cómo se cuelan los últimos rayos de sol en la plaza, escapando por debajo de los arcos. Antes de dormir en uno de los bellos hostales y hoteles en palacios y casas coloniales que ofrece Sucre, baja el bello Pasaje de Santa Teresa, un callejón empedrado que dicen que está encantando y que sale algún duende cuando cae la noche. ¡Esta ciudad es algo que hay que ver en Bolivia, sí o sí!
Samaipata
Llegar al pintoresco pueblo de Samaipata equivale a desacelerar. Y, después de llevar varios días ya explorando Bolivia, ¿qué mejor que bajar un poco velocidad y dejarse llevar? Su ritmo lento y su clima apetecible fue lo que probablemente atrajo a varios extranjeros a quedarse aquí y la verdad es que Samaipata ofrece un ambiente algo hippie, tranquilo, relajado, ideal para quienes ya llevan unos cuantos días de viaje. Sus pequeños restaurantes y cafeterías monas que se encuentran a lo largo de pequeñas calles que salen de la plaza principal son ideales para recuperar energías después de los paseos del día. Y es que lo que no faltan son planes alrededor de Samaipata. Visitar el Fuerte de Samaipata (patrimonio de la UNESCO por su importancia arqueológica, una de las construcciones monolíticas más importantes del Mundo), hacer una de las rutas de senderismo por el místico Parque Nacional Amboró y descubrir sus helechos gigantes o llegar hasta el impresionante Codo de los Andes son tan sólo algunos de ellos.
Reserva Nacional de Fauna Andina Eduardo Avaroa
Aunque el impresionante Salar de Uyuni acapare toda la atención, antes de llegar a él hay algo imperdible que ver Bolivia: la Reserva Nacional Eduardo Avaroa. En esta reserva, muy cercana a la triple frontera de Bolivia con Chile y Argentina, pasarás por paisajes dignos de películas de ciencia ficción y por otros que serán de los más bellos que habrás vito nunca. Intentarás contar cuántos flamencos pasean por la increíble laguna Hedionda o por la bella laguna Colorada, pasearás por desiertos que parecen salidos de un cuadro de Salvador Dalí y caminarás entre el humo de géiseres de azufre con lava a 85º. Con suerte, además, saludarás a algún que otro zorro andino mientras descansas en un Árbol de Piedra…
Todo esto antes de llegar al plato fuerte del viaje a Bolivia y al que motivos no le faltan para ser el más conocido del país: el impresionante salar de Uyuni. No te preocupes, hay varias opciones para llegar al Salar y la que te recomendamos es la de 4 días y 3 noches que sale desde Tupiza e incluye pasar por las maravillas de la Reserva Nacional de Eduardo Avaroa, Sud Lípez, Nor Lípez y, finalmente, el Salar de Uyuni.
¿A qué esperas para comprar el billete para viajar a Bolivia en tus próximas vacaciones?
Además, no querrás perderte esta guía que responderá a muchas de tus dudas:
Artículo escrito por Inês Nunes de Randomtrip.es
2 comentarios en “Qué ver en Bolivia más allá del Salar de Uyuni”
EXCELENTE LUGAR
Hola Maria, ¡así es! Nos encanta.