En IATI, además de ofrecerte los mejores seguros de viajes internacionales, llevábamos años comprometidos con la labor de concienciar sobre la enorme importancia de practicar un turismo responsable en los diferentes destinos que proponemos visitar. El turismo responsable, por suerte cada vez más en boca de todos, abarca desde el respeto de las tradiciones y costumbres del lugar al que viajemos, hasta el hecho de reducir nuestros residuos mientras viajamos. Hoy queremos hablarte del turismo responsable con animales, o dicho de otra manera: cómo evitar el turismo irresponsable con animales.
Contenidos
- 1 Ejemplos de turismo no responsable con animales
- 1.1 Nadar con el tiburón ballena en Filipinas
- 1.2 Posar con tigres
- 1.3 Cafeterías de animales
- 1.4 Liberar pájaros enjaulados
- 1.5 Utilizar elefantes a modo de diversión
- 1.6 Feeding: dar de comer a peces
- 1.7 Peleas de Gallos
- 1.8 Tocar estrellas de mar
- 1.9 Café de civeta, café de caca
- 1.10 Pisar el coral
- 1.11 Inmersión en jaula con el tiburón blanco
Ejemplos de turismo no responsable con animales
En este listado encontrarás algunas de las prácticas, por desgracia, más comunes en lo que al turismo con animales se refiere. Con ellas nos gustaría mostrarte un ejemplo de todo lo que es posible evitar con un poco de información. Pero hay mucho más casos además de estos, por ello siempre nos gusta recomendarte que intentes evitar cualquier tipo de actividad que implique interaccionar con animales si tienes la menor duda sobre cómo puede afectar al animal. Ante la duda es siempre mejor evitar. Ten en cuenta también que mucho lugares en los que sea realizan prácticas negativas para los animales se esconden tras nombre como “Santurario” o “Reserva” que pueden llevar al engaño.
Nadar con el tiburón ballena en Filipinas
A este caso en concreto le dedicamos un artículo en exclusiva, “Nadar con el tiburón ballena en Filipinas”, pero igualmente nos gustaría volver a recordarte algunos conceptos a tener en cuenta para que puedas disfrutar de esta actividad llevando a cabo turismo responsable con animales. En Filipinas es posible nadar con el tiburón ballena en lugares como Donsol, Puerto Princesa o Padre Burgos. Se trata de una increíble experiencia en la que podrás ver de cerca al pez más grande del mundo y alucinar con su belleza. Cada uno de estos lugares ofrece la oportunidad de ver al animal en diferentes épocas del año ya que se trata de un escualo con un ciclo migratorio muy marcado. Por desgracia, uno de lugares donde es más popular este avistamiento es en Oslob. Eso se debe a que, en vez de respetar su ciclo migratorio, les alimentan durante todo el año para que siempre estén ahí. Esto tiene nefastas consecuencias para el whale shark, como por ejemplo:
– Se acostumbra a que los barcos le den alimento y eso provoca que se acerque a otros barcos y sufra heridas profundas por los golpes y cortes
– Al no ser una actividad controlada como en otro lugares, no hay apenas normas de conducta y los bañistas se pueden acercar sin límite. A consecuencia de esto el tiburón ballena recibe patadas, cortes con las aletas, estrés e incluso infecciones por las cremas solares no ecológicas.
– El alimento que reciben es a la larga nocivo para su salud
– Se varía su ruta migratoria, llegando a anularla por completo, y eso afecta a un sinfín de otras especies
Por ello, si tienes pensado realizar una ruta por Filipinas te pedimos por favor que evites el circo de Oslob.
Posar con tigres
Pese a que no hace mucho recibimos con entusiasmo la noticia del popular Tiger Temple de Tailandia, este volvió a abrir y existen otros lugares parecidos en los que se llevan a cabo las mismas prácticas de turismo no responsable con animales. Usemos la lógica básica ¿Un depredador de más de 250 kilos, garras y grandes colmillos posaría libremente contigo? No, te comería sin problema alguno. Este tipo de lugares suelen tener drogados durante gran parte del día a los tigres para que no ataquen y les hace pasar por una muy dolorosa operación llamada desunglación en la que se extirpan sus garras. La cosa no acaba aquí, se les obliga a criar de forma continua y se aparta a los cachorros de sus madres para usarlos como modelos en fotos en los que el turista irresponsable les da de comer con un biberón. Además, el vivir encarcelados y drogados les provoca enfermedades y problemas como dolores de espalda, dificultad para comer o altos niveles de estrés que les llevan a comerse su propia cola. Una larga lista de sufrimiento que puedes evitar si practicas turismo responsable con animales y evitas estos lugares.
Cafeterías de animales
Ésta es una práctica muy popular en algunas ciudades de Japón y, pese a lo inofensiva que puede parecer, también implica la utilización de animales para uso turístico de forma totalmente negativa e irresponsable. Un claro ejemplo de ello son las cafeterías de búhos, en las que puedes tomarte algo en salas en las que varias de estas aves observan o se posan a tu lado para que las toques. El búho es un animal nocturno y pasar el día entero siendo tocado y movido afecta a su carácter, alimentación y ciclo del sueño. Además, como en otros lugares en los que se utilizan aves, se les practica una alectomía: la extirpación de las falanges de sus alas para evitar que escapen volando.
Otros animales que puedes encontrar frecuentemente en este tipo de cafeterías animales son los gatos. No son más inofensivas que las de búhos, ya que dado el carácter reservado e independiente de muchos gatos se les droga para que se queden dormidos y mansos junto a los clientes.
Liberar pájaros enjaulados
Esto te lo puedes encontrar fácilmente en países como Myanmar, Laos o mucho más frecuentemente en algunos templos de Tailandia. Sucede que al acercarte a alguno de estos templos te cuentan que la tradición dicta que liberar un pájaro enjaulado es una ofrenda símbolo de libertad que da buen augurio. De primeras la idea puede sonar bien “dejar en libertad en pequeño pájaro que vive hacinado junto a decenas de otros pájaros en una diminuta y sucia jaula”. Pero la realidad es totalmente diferente, pues estas aves han sido domesticadas para volver a la jaula unos minutos después de su liberación. Si quieres ayudar a que estos pájaros sean libres algún día evita liberarlos para conseguir que tarde o temprano este cruel negocio termine.
Utilizar elefantes a modo de diversión
Hemos titulado este apartado “utilizar elefantes a modo de diversión” porque subirse a lomos de un elefante se queda corto. Los paquidermos son animales enormes y poderosos, pero eso no significa que estén hechos para que alguien se suba encima de ellos. Muchas veces no solo han de soportar el peso de una persona, pues es común que se suban a ellos parejas, acompañadas del domador y sentadas en unas monturas que incrementan aún más el peso sobre la columna vertebral. Si realmente te gustan y aprecias estos animales NO subas jamás sobre uno de ellos. De igual manera, un elefante no necesita que lo bañen, jugar con un balón o pintar un cuadro. Todas estas prácticas son profundamente dañinas para estos bellos animales que en la gran mayoría de los casos vienen de haber vivido en una triste esclavitud. Si quieres ver elefantes de cerca puedes disfrutar, por ejemplo, de un bonito safari en Sudáfrica.
Feeding: dar de comer a peces
En muchas playas del sudeste asiático es cada vez más común, sobre todo para el creciente turismo chino, tours que incluyen el feeding entre sus diferentes actividades. Feeding consiste en bajarse del bote en alguna playa y soltar comida que atrae a cientos y cientos de peces. En ese momento muchos aprovechan para fotografiarlos de cerca y otros, turistas irresponsables de alto nivel, aprovechan para cogerlos. Alimentar a estos pequeños animales multicolor, que puedes ver sin mucha dificultad ni necesidad de feeding, provoca que estos se acostumbren y modifiquen sus hábitos alimenticios; que coman un alimento no apto para ellos que puede causarles enfermedades; que se acerquen para buscar comida a todos los barcos que escuchen y mueran con sus motores e incluso que lleguen a morder a los bañistas si se sienten impacientes y quieren ser los primeros en el banquete.
Peleas de Gallos
En algunos de países de Sudamérica y otros de Asia, como por ejemplo Filipinas, todavía quedan lugares en los que es posible asistir a ver en directo peleas de gallos. En este caso sobran cualquier tipo explicación para justificar por qué evitar apoyar esta barbarie, pero aun así queremos contarte un par de cosas. Se obliga a vivir a gallos y gallinas separados, y estos primeros viven atados, unos cerca de otros, para crear así una necesidad constante de lucha y reclamación del liderazgo del territorio. Esto somete a estas aves a una vida de constante estrés y, a la que tienen oportunidad, se lanzan a atacarse entre ellos. Una vez empieza la pelea se les ata unas afiladas cuchillas en las patas que hacen que a cada golpe que se den sufran profundos cortes que mutilan cada una de sus partes, convirtiendo la escena en un lamentable baño de sangre. Por suerte con el paso de los años el número de peleas de gallos ha ido descendiendo, pero es importante que el viajero no apoye este tipo de prácticas para ayudar a que no se convierta en un atractivo turístico más.
Tocar estrellas de mar
Fíjate en la primera palabra: “tocar”. No hablamos ya de “sacar estrellas de mar del agua”, directamente: no toques las estrellas de mar. Por suerte, cada vez son más los viajeros que conocen lo sensibles que son estos preciosos animales marinos. Con el tiempo y las labores de concienciación se ha conseguido que cada vez más gente sepa lo básico: las estrellas de mar se mueren a los pocos segundos de salir del agua, por lo que es importante no hacer eso con ellas bajo ningún concepto. Sacarlas para hacerles una foto, además de ser un acto de turista no responsable, puede que no en todos los casos las mate al instante, pero las llega a dejar tan aturdidas que puede causar que una vez las vuelvas a dejar en su lugar no se muevan más o sean presa algún depredador que las vea indefensa. Eso es debido a que necesitan estar en el agua para poder respirar.
Pero queremos insistir en lo siguiente: no se trata solo de no sacarlas del agua, no hay que tocar ni a las estrellas de mar ni a ningún animal salvaje en libertad. Las estrellas de mar cuentan con un sistema nervioso muy básico y son altamente sensibles a cualquier tipo de manipulación. El simple hecho de manosearlas para hacerse un selfie con ellas puede darles una subida de ácido láctico que acabe con su vida en pocos minutos. ¿Quieres una foto con una estrella de mar? Sumérgete hasta llegar a ella y posa tú con tu cámara acuática sin necesidad de molestarla.
Café de civeta, café de caca
Lo verás si viajas a países como Filipinas, Vietnam o Indonesia. El café de civeta, o kopi luwak, es conocido como el café más caro del mundo, y para alguno el más sabroso. Tiempo atrás éste se recolectaba de las heces de las civetas que defecaban tras comer el grano en las plantaciones de café, pero dada la alta demanda y popularidad el negocio entorno a esta bebida dio un giro de 180 grados. Ahora las civetas viven en diminutas jaulas, una junto a otras sin apenas ventilación, y han pasado de comer esporádicamente granos de café a hacerlo prácticamente sin pausa durante todo el día para aumentar la producción. Esta triste práctica lleva a estos animales a sufrir diferentes enfermedades causadas por la mala alimentación. Investigaciones de PETA o la BBC han demostrado las crueles condiciones en la que las civetas viven y que, pese a que el café se venda como de civeta en libertad, suele ser en la mayoría de caso de cárceles de civetas.
Pisar el coral
Es muy posible que al pensar en coral te venga a la cabeza la imagen de esas bellas formas enraizadas que van creciendo, parecidas a las ramas de un árbol. Este es quizá el tipo más popular y eso le ayuda a que cada vez más los bañistas hagan turismo responsable y eviten tocarlo: por un lado porque son muy frágiles y se rompen con extrema facilidad (ten en cuenta que tardan muchísimos años en crecer unos pocos centímetros y son la casa de muchas especies marinas que los necesitan para sobrevivir), y por otro porque pueden ser los causantes de profundos cortes e infecciones.
Pero, además de este tipo de coral, hay otros que mucha gente confunde con rocas y se posan y caminan sobre ellos. Las consecuencias son las mismas: la muerte del coral, la aniquilación del hábitat de otras especies y posibles cortes en tu piel. Por ello, por favor, no te poses en nada que no sea una roca totalmente despejada o en la propia arena.
Inmersión en jaula con el tiburón blanco
Muy popular en lugares como Sudáfrica es la inmersión en jaulas con el tiburón blanco, uno de los depredadores más temidos del mundo y de los más letales del océano. El bañista se encierra en una jaula subacuática para llevar a cabo esta actividad. Para atraer el tiburón en muchos casos primero se vierten sangre y vísceras de peces en el mar y, una vez llega el escualo, se le torea con trozos de pescado para hacerle pasar cerca de la jaula. Además de lo poco ético de engañar así a un animal, por mucho que sea en su hábitat natural, se ha demostrado que en los lugares que se realiza se ve afectado el compartimento del tiburón blanco y se dan muchos más cosas de ataques a bañistas y surfistas en playas cercanas.
Somos conscientes de lo muy impactante que puede ser una foto con alguno de estos animales al compartirla en redes sociales. Pero no todo vale para conseguir likes. Los animales deben ser respetados y es muy importante entender cada uno de estos casos expuestos, ya que nos ayuda a poder detectar con facilidad otros en los que nos podamos encontrar. El mejor truco es así de sencillo: si no sabes cómo puede afectar una actividad a un animal , NO la lleves a cabo. Proyectos como el de FAADA trabajan a diario para ayudar a fomentar el turismo responsable con animales. Si consultas tu próximo destino en su página web seguramente encontrarás información que te ayudará a prevenir casos de turismo irresponsable por tu parte.
10 comentarios en “Turismo irresponsable con animales”
Gracias por el artículo. Hemos llegado un poco tarde a él porque hemos estado en Chitwan y hemos montado en un elefante. Ciertamente, hemos pecado de ignorancia aunque nos pareció que la información que nos daban insistía en el cuidado de estos animales.
En fin, sentimos lo hecho porque somos personas sensibles.
Gracias por el artículo.
Hola Ascen, gracias por tu comentario. Lo importante es actuar una vez conoces la información y compartirla. Nadie nace aprendido 🙂 Yo me bañe, por falta de info, con delfines en cautiverio, cosa que nunca haría ahora. Poco a poco todos aprendemos. ¡Un gran abrazo!
Artículo muy interesante !!!
En ocasiones no somos conscientes del mal que hacemos cuando contratamos actividades con animales. Espero que artículos como este ayuden a concienciar a la gente.
¡Gracias! Ojalá algún día todo el mundo entienda la importancia del turismo responsable
Qué importante es este artículo… y qué completo. Ojalá cada vez más gente tome conciencia. Yo he cometido varios errores en el pasado, y nunca mais…
Hola Belén 🙂 Pues sí, todos hemos cometido error en mayor o menor medida. Cuanto más informados estemos menos daño haremos a los animales. ¡A disfrutar del Cola Cao del fin de semana!
Genial el artículo. Nos conciencia a todos de las responsabilidades que tenemos que tener cuando viajamos.
¡Exacto, Isabel! Poco a poco conseguiremos que la gente se vaya dando cuenta de estas cosas 🙂
¡BRAVO!
Me ha encantado este artículo y suscribo cada palabra que decís.
Ojalá algún día nos demos cuenta todos de que los animales no están para nuestro disfrute.
Saludos
¡Gracias Claudia! Si todos ponemos nuestro granito de arena seguro que lo conseguiremos 🙂